COSAS QUE ESPERO DE NUEVAS ENTREGAS DE GODZILLA Y EL MONSTRUOVERSO

 

¡ARREA PATRÁSSSS!

Quien haya visto la saga de Godzilla lo sabe (cough Godzillamaratón cough), pero a pesar de que la mayoría de sus entregas son más simples que el mecanismo de un sonajero, con efectos especiales denigrantes en su mayoría (sin contar con las últimas entregas hechas por el mercado americano), y personajes humanos que a veces dan más pena que gloria, e incluso risa (como en la antigua King Kong vs Godzilla), el amor que sentimos por el lagarto radiactivo japonés es infinito e inagotable. Lleva el bicho dando caña durante más de 60 años, y ahí sigue, el campeón. Con las nuevas cintas realizadas por Warner Bros, se abrió la veda a la era Legendary, y al Monstruoverso, que si bien comenzó de una manera un tanto escabrosa para mi gusto (Godzilla de Gareth Edwards me pareció un poco tostón, la verdad) ha ido evolucionando hasta darnos con dos entregas más que satisfactorias: Godzilla Rey de los monstruos (mi película de acción favorita del año 2019), y Godzilla vs Kong. Esta última es especial para mí, porque supuso la mejor manera de volver a las salas en la época de pandemia, una en la que estaba con muchísimas ganas de cine. Y como yo, muchos otros se alegraron de tener un filme así en ese tiempo tan convulso. 

De modo que, viendo que pronto sacarán otra entrega (¡y para marzo del año que viene!), qué menos que hablar de las cosas que me gustarían ver en el futuro de esta saga.

1. Que salgan más monstruos: ¿Qué pasó con kaijus como Rodan, Mothra, y la jauría que aparecía en Godzilla Rey de los monstruos? Parece que el Monstruoverso se centra en Godzilla y Kong, y poco me gustaría que se convirtieran de ahora en adelante en filmes donde sólo se lucieran ellos dos. Una razón de la ausencia tan notable de los kaijus de Godzilla Rey de los monstruos en Godzilla vs Kong es que por órdenes de Godzilla se pusieron a hibernar, pero... La saga siempre se caracterizó por añadir nuevos enemigos (y aliados) a Godzilla, ya fueran plantas gigantes como Biollante o conglomerados monstruosos como Hedorah... Y sí, es cierto que la compañía tiene los derechos de pocos kaijus, pero, si pudieron hacer unos cuantos más nuevos en las anteriores entregas, como los Mutos, Behemot, o los habitantes de la tierra hueca, ¿qué menos que añadir unos pocos más? Variedad, señores, variedad.

2. Mechas, mechas, mechas: Igual que con los kaijus, no estaría de más añadir rivales robóticos para Godzilla, bien sea el rediseño de MechaGodzilla (oh, mi querido Kiryu) o un MechaGhidorah. La puerta se dejó abierta cuando explicaron que el MechaGodzilla de Legendary usaba el cerebro de Ghidorah para funcionar, y creo que no hace falta añadir nada más...

¡Míralo! ¡Es un diseño perfecto! ¡No hace falta nada más!

3. Personajes humanos más currados: No es que me molestasen los de las anteriores entregas (bueno, en la de 2014 el protagonista era un poco soso, todo hay que decirlo), pero, ya que tienes directores que parecen comprender, y amar, el legado de Godzilla, qué menos que poner personajes humanos a la altura. No es que la saga de Godzilla siempre, siempre, SIEMPRE, tuviera personajes decentes, que sirvieran para poca cosa, pero cuando los hacía bien, los hacía bien, como en la primera cinta de Godzilla, la del 54, con ese Serizawa que se sacrificaba para evitar que su arma pudiera ser usada con malévolos fines (y del que hicieron un guiño en Godzilla Rey de los monstruos más que notable), o mi favorito, el padre y la hija de Godzilla GMK, una representación del choque entre la generación afectada por los desastres de la segunda guerra mundial y Godzilla, y la juventud que desconoce completamente esa faceta tan trágica de su país, sin olvidarme de la protagonista de Godzilla vs MechaGodzilla (un personaje femenino que ya quisieran hacer ahora muchas productoras actuales) por mentar unos pocos... Y hablando de directores que respetan el legado de Godzilla...

 

 

4. Los directores: Si algo caracterizó a las dos últimas cintas de Godzilla de Legendary es que los directores conocen bastante bien el universo del monstruo nipón, en especial el de Godzilla Rey de los monstruos, Michael Dougherty: desde la mentada muerte de Serizawa, hasta el destructor de oxígeno, pasando por el nombre alternativo de Ghidorah y su origen extraterrestre. Y no sólo eso, sino que supo cohesionarlo todo para, a la vez que rendía homenaje a cintas de la era Showa (sobre todo Godzilla - Invasión Extraterrestre, y Godzilla vs Monster Zero) con el uso de unos efectos especiales de aúpa (eliminando sobre todo ese puñetero filtro gris de la cinta de Gareth Edwards, que cansancio daba). Adam Wingard, el director de Godzilla vs. Kong, hizo otro gran trabajo dándonos un más que disfrutable entrega, aunque yendo más por el camino de sucesivos enfrentamientos de Godzilla contra Kong. El futuro está ahí, y estos dos directores son, en mi opinión, los más indicados para seguirlo. 

Joder, es que compara esto con la batalla de Godzilla y los Mutos de 2014 y te quedas ciego con tanta oscuridad (hasta tal punto de que lo han subido a Youtube con mayor luminosidad y aún así no la sigo viendo tan bien como en Godzilla Rey de los monstruos)

 

5. ¿Y qué pasa con Japón?: Ah, Japón. La verdad es que Shin Gojira fue una excelente cinta con la que revitalizaron a Godzilla. Hideaki Anno supo dar un toque mucho más tétrico al lagarto radiactivo, sobre todo con sus etapas de transformación, y esa escena final en la que parecía que unos seres humanoides querían escapar de su cola... Más allá de las películas de Netflix, que aún no he visto (deshonra sobre mi vaca), me gustaría saber qué planes hay sobre una segunda parte de Shin Gojira. Como sabéis, Hideaki Anno estuvo ocupado desde que la estrenó, tanto con la última entrega de Evangelion como con Shin Ultraman y Shin Kamen Rider. Que vuelva a hacer otra cinta de Godzilla, bien una segunda parte de Shin Gojira, u otra (como pasaba en la serie Showa, que había entregas inconexas), bien bajo su batuta o la de otra persona, es algo que sin duda está en el aire, pero por soñar... por soñar que no quede. Y coño, que ese final me dejó con los dientes más largos que una semana sin pan, seamos honestos.

Esa puñetera escena de Shin Gojira fue también mi combustible de pesadilla durante varias semanas...

En fin, estos son mis deseos para el futuro del monstruoverso. Mi quiniela personal, si preferís llamarlos así. A ver cuántos se cumplen, y si el legado del monstruo radiactivo se mantiene como se merece. 

Larga vida al rey, chavales.

PD: Acabo de leer que una nueva cinta japonesa de Godzilla va a estrenarse en el 2023. Bajo los mandos de otro director, eso sí.