miércoles, 13 de septiembre de 2023

XENOBLADE CHRONICLES 3: FUTUROS REDIMIDOS

 



Cómo, ¿que acabo de terminar la expansión del Xeno 3, que salió hace ya la tira, y que no probé hasta ahora porque estuve esperando inútilmente a que la lanzaran en un cartucho físico como pasara con el Xeno 2? ¿Y que lejos de parecerme una ampliación digna como fuera la de Torna, la he encontrado insufrible, e, incluso, al contrario de lo que me pasara con la trilogía nueva de El planeta de los simios, que también cuenta una historia que nadie pidió pero que al final se le coge cariño, podríamos vivir perfectamente sin ella? ¿Y que, sobre todo, tiene un concepto de la exploración que se me asemeja a la sodomía medieval?

Pues todo eso y más, es Xenoblade Chronicles 3: Futuros redimidos.

Acompáñenme a esta triste historia.

Ojo, que hay destripes de la trama de este y otros juegos de la franquicia.



Esta expansión comienza mucho antes de los eventos del tercer Xenoblade. Como muchos seguidores nos temíamos, la historia que se nos prometió es la de los fundadores de la ciudad, y no un posible epílogo donde los seis protagonistas volvieran a estar juntos. Sí, Nintendo no es de las que suelan contentar las peticiones de los fanáticos (cough Waluigi en el Smash cough), pero en fin, uno pensaría que al menos, estaría bien, ¿verdad? Pues por desgracia, en mi caso, no. Y es que no sé qué manía tiene el juego, de poner a Z y los Moebius como los típicos villanos que en realidad no son tan malos y que tenían sus motivos.

 

Eh, que si es porque chasquea los dedos con el sonido de la Switch y eso lo hace más carismático, conozco a otro pavo al que también le gusta chasquear los dedos...

 

Ya al final del Xeno 3 se nos contaba la naturaleza de este personaje (gracias, cinemáticas gigantescas), que era una especie de inteligencia artificial que tomó la decisión de congelar el presente y crear un mundo con dos facciones que se matan entre sí, así como los Moebius, a fin de evitar la aniquilación total que esperaba a los dos mundos de los anteriores Xeno si lograban fusionarse. Todo esto, para, según él, proteger el mundo. Uno en su sano juicio pensaría que hay que meter a este personaje en el manicomio, pero entonces, cuando le vences, el juego te suelta lo siguiente:

 


 

Y es que esto es lo que me cabrea del asunto. Te dicen que tanto Z como los Moebius le tenían miedo al cambio y que es algo que nos puede pasar a todos... De acuerdo, me gusta esa observación, pero perdonar así a un villano como Z, que ha matado y resucitado Dios sabe cuántas vidas, me parece hasta insultante, sobre todo comparado con Mahlos, quien sencillamente no tuvo elección de elegir otra cosa que no fuera muerte y destrucción, cosa que le pasa a muchos otros villanos de videojuegos, películas y demás. 

 

Hasta siento más simpatía por los dinosaurios antagonistas de Jurassic Park que por Z, con eso lo digo todo...

 

 Pero lo que de verdad me fastidia de la puñetera expansión, es que si lo piensas bien, la historia no es nada necesaria. En Torna, se nos narraba la caída de Myhtra al abismo, de cómo tuvo que encerrarse para que nadie despertara su poder, y de la batalla que tuvieron que librar unos personajes a los que cogías un enorme cariño por la amistad que lograron forjar. No consiguieron la victoria, fracasaron estrepitosamente (Torna fue destruida y Mahlos volvería mucho después), pero fue un viaje que hice gustoso. Y todo ello en poquísimas horas, aún incluso sabiendo el destino que les deparaba, por todo lo que se nos contó de ellos en Xenoblade 2. Como ver Titanic. Algo así. El problema de Futuros redimidos es que, pese a contar también una historia anterior, como ya he dicho, no es imprescindible. Sí, ahondar en el pasado de los fundadores de la ciudad no pinta tan mal, pero poner a Alpha como el villano es un lío de tres pares de narices que se podría haber solventado dando a Z ese puesto, a fin de cuentas, ¿no luchabámos contra los Moebius? Pues eso. Algunos dirán que se hizo un alto al fuego hasta que Alpha fuera derrotado y por ello Z se unió a Rex y Shulk para detenerle, pero ¿no habría sido más fácil poner desde un principio a Z como el villano? ¿Que Shulk y Rex luchan contra él y no pueden hacer nada, así que se reúne el grupo de los fundadores y le hacen frente, ganando tiempo? Porque sí, mucho alto al fuego pero bien que N destruyó la ciudad porque ahí se hallaba Alpha... Al final a lo que voy es que da igual, si quitas a Alpha y pones a Z, la historia no sufre tanto, volviéndose prescindible.

 

Qué asco le tengo a este tío, la verdad...

Al final, todo resulta en puñetero fanservice, rescatar a viejas glorias para ponerlas todas juntas y que disfrutemos como enanos. Con Rex ya me tenían convencido, ya es solo por las frases que suelta y su puñetera aparición, cómo ha crecido y se ha convertido en todo un hombre y figura paterna... Pero claro, si no has jugado al primer Xenoblade te pierdes cosas de ese juego, sobre todo las relacionadas con el pasado de Shulk, como me ha ocurrido a mí. Tampoco es que eso fastidie la experiencia, mas está ahí.  Ah, y no debemos olvidarnos de sutiles diálogos de fondo que parecen hacer referencia al Xenoblade X.

 

Eso sí, y con esto me quito el sombrero, que mantuvieran esta pose hizo que se me saliera una lagrimica de la nostalgia...


Pero aún con eso, aún con eso, podría pasarlo todo por alto si no fuera por la exploración. Oh, ya sé que en los Xeno hay que explorar como un jabato. Y oye, que eso, desde el X, es algo que me encanta (no en vano ese es mi juego de mundo abierto favorito). Descubrir nuevos lugares y monstruos, conquistar altas montañas, amplios mares... El mundo no tiene límites. El problema, es que sí o sí tienes que encontrar lugares nuevos, matar monstruos, coleccionar objetos, para obtener puntos de afinidad con los que mejorar a los personajes, desbloquear nuevas ranuras con nuevas mejoras... Vamos, que como viene siendo tónica de Nintendo, la puñetera manía de lograr el 100 %. Y a mucha gente no le molestará, pero a mí, pensar que tengo que patearme el escenario por esa razón, me saca de quicio, sobre todo si tengo, como es habitual, que recurrir a guías para ello. Sí, las usé con los otros Xeno, pero en casos muy concretos y cuando me atascaba, pero aquí ha sido la tónica habitual, y no hay cosa que más me exaspere que dejar el juego para leer cómo llegar a tal destino o conseguir tal mejora.

 

Yo cada vez que me dicen que tengo que sacar el 100 % de un juego sí o sí


Y no, no estoy loco o me he dado una hostia contra la pared, ya sé que en los otros Xeno había que explorar para conseguir nuevos objetos: la diferencia es que ahí era algo que hacías por voluntad propia, para descubrir nuevos lugares, pero aquí, lo haces casi por obligación, porque sientes que aún teniendo a tus personajes al máximo nivel, como les falta una ranura para desbloquear poderes, no vas a estar a la altura de los jefes, como me pasó a mí con Alpha. Mención aparte a este capullo que, como en el Digimon Hackers Memory, tiene un ataque que puede destrozarte a la mínima oportunidad, aún sacándole seis niveles o más. Y para echar sal en la herida, la mejor manera de vencerle es usando a un personaje con un movimiento que puede evitar cualquier daño... Pena que te dieran esa información nada más empezar la aventura y se te olvide, como me pasó a mí, teniendo que recurrir, cómo no, a usar una guía. E igualmente, en el Xeno 2 tenías a Mahlos como desafío final que podía matarte de un solo golpe, pero, uno, si conseguías ocho orbes para el ataque en cadena te lo destrozabas (que esa es otra, los ataques en cadena del dos son mucho más comprensibles que los del tres con las puñeteras cartas), y dos, ahí cualquier personaje podría revivir a los otros, no sólo los sanadores como pasa aquí (cierto que hay un objeto que hace que puedas revivirlos sin ser curandero, pero cuesta un ojo de la cara). En conclusión, si no llego a consultar guías, me muero.


Yo cada vez que tengo que consultar guías no como opción sino como obligación


En fin, será que no soy tan bueno con los videojuegos, que me esperaba otra cosa, o vaya usted a saber. Lo que sí tengo claro es que no puedo recomendar con tanto fervor esta expansión, una que incluso me ha hecho ver de nuevo lo bueno que tenía el Xenoblade 3, aún con sus enormes errores, e incluso, querer jugar otra vez al Xenoblade 2. Es más, aún sabiendo que en el pase no sólo viene incluida esta historia sino también los desafíos, trajes especiales y demás, seguiría sin recomendarlo. No sé si tendremos al final ese Xeno 4 que comenté, aún si el propio final de este y el Xeno 3 dan a entender, en cierto sentido, que sí, con esos créditos de cierre que incluyen escenas de los tres juegos y un final donde ves las dos Tierras unidas en una sola con una luz que se dirige a ella cual conclusión de Gunbuster (hablando de esto con gente del Discord de Xenoblade Spain me dijeron que daba a entender que enlazaba con el final de Xenosaga, o algo así). De confirmarse, sólo espero que no vuelvan a meter mecánicas de exploración como estas, porque para mí, han matado completamente la experiencia.

Al menos, el sistema de combate y los créditos finales no han estado tan mal.

 






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